Etapa 9. Montamarta-Camarzana de Tera

 Etapa de 81,6y 783 m. de desnivel. Etapa penosa para mí. 1 de mayo

He pasado una noche penosa por un cuadro gastrointestinal, he descansado fatal y me he levantado hecho polvo. No he podido desayunar, solo un zumo y media tostada. He intentado de todas formas hacer la etapa.

Hemos ido hasta Fontanillas de Castro donde hemos parado a almorzar. Hemos pasado por las ruinas del castillo de Castrotorafe.

Tras el almuerzo me he vuelto a encontrar mal. Aunque solo he tomado yogur y zumo. Hemos reanudado la marcha hasta la Granja de Moreruela con desvíos que nos han obligado a dejar el track. En la Granja se divide la vía de la Plata que sigue hasta Astorga y el Camino Sanabrés.

Reanudamos la marcha y al llegar al desvío que va al monasterio yo decido esperarlos en una sombra y que vayan ellos para encontrarnos en el siguiente cruce después. Intento ahorrar todo lo posible.

Cuando se reincorporan me avisan para encontrarnos en el cruce. Se me hace eterno llegar

Desde aquí nos dirigimos a Puente Quintos sobre el Esla. Cada pequeño repecho me cuesta un mundo subirlo y deben esperarme. Finalmente llegamos.

Yo tomo la decisión de seguir hasta Tábara por carretera, ya que le he preguntado a dos lugareños y me han dicho que hay !5 km., la mayoría de bajada. Francesc decide acompañarme para que no vaya solo.

Iniciamos la marcha por carretera y el primer km que es de subida sin superar al 5% se me hace interminable. Cada rampa es un mundo, desniveles del 4% los subo con el plato pequeño y el tercer piñón grande. Fatal. En Faramontanos de Tábara, a mitad de camino paramos en un parque a la sombra para que me recupere. Me refresco varias veces en una fuente y como una galleta. Reanudamos la marcha y cada poco Francesc me anima a seguir. Finalmente llegamos. Gràcies Francesc, sin tu apoyo hubiese sido mucho más difícil.

Nuestros compañeros llegan 5 minutos antes. Ha sido un recorrido al principio por pistas en ascenso rodeando el embalse y luego por pistas con toboganes en un entorno quemado por el fuego hace un año. 

Comemos en Tábara. Más bien comen porque yo sigo sin poder comer casi, y decido ir al final de etapa en Camarzana de Tera, en taxi, para intentar recuperarme, ya que veo difícil seguir al día siguiente.  En el taxi me llevo las alforjas de todos.

Ellos hacen el recorrido, casi siempre en el entorno de los restos del incendio. Se encuentran tres repechones muy duros , que incluso sin alforjas solo sube en bici Gabriel  

En Santa Marta de Tera visitan la estatua de Santiago peregrino más antigua.

Llegan a Camarzana, mientras yo he aprovechado para descansar. Cenamos yo incluido, parece que estoy algo mejor.

Mañana al levantarme decidiré si sigo, por lo menos por carretera, o me vuelvo para casa